jueves, 12 de marzo de 2015

Comedores, ¿problema o solución?

Solo habría que echar un vistazo al pasado y ver como a principios del siglo XXI y hasta el gran cambio social que ha provocado la crisis económica mundial actual para darnos cuenta de que los comedores eran privados a los cuáles asistían los hijos de clases sociales mayores en su gran mayoría. Estas familias tenían que hacer frente a horarios sin disponibilidad personal para atender a la salida y entrada de los niños a la escuela, por lo cual, dieron mano de los comedores y actividades extraescolares donde sus hijos estarían ocupados y bajo supervisión mientras los padres trabajaban. Sin embargo, ¿Sigue esto siendo así? . ¿Siguen siendo los comedores instituciones privadas? . ¿Por quién es demandado el servicio que ofrecen?. Con la llegada en dos mil siete de la crisis económica la estructura social presente en la sociedad dio un vuelco, aumento la pobreza, el paro y se redujeron considerablemente los salarios bajo amenaza de despido en el sistema laboral. Todo esto y más lleva consigo el cambio evidente de la sociedad llevando a los gobiernos a tomar medidas. Es debido a esto que el Gobierno de Canarias extendió el servicio gratuito de comedor a los alumnos de ESO cuyas familias no dispongan de recursos o se encuentren en situación de exclusión social, de esta forma, unos 38.000 estudiantes de tres a dieciséis años podrían beneficiarse de esta medida. Hemos de añadir que no solo es la pobreza lo que lleva consigo una mala alimentación sino también la falta de educación nutricional junto con un mercado beneficiador de las grandes multinacionales que apartan los alimentos ecológicos del mercado. ¿Consecuencias? La mala alimentación deteriora la salud de la clase obrero, la más expuesta a las malas comidas y que más recortan de su renta en alimentación para hacer frente a otros gastos, lo cual aumenta la posibilidad de enfermedades que, a su vez, no pueden ser tratadas de la misma forma que antaño por los recortes en sanidad pública. Todo esto suena devastador y aparenta acabar con la posibilidad de recuperar el estado de bienestar que una vez poseímos pero, dejando la oscuridad de estos asuntos a un lado, podemos ver soluciones y esperanza. Con una ley de persecución del fraude fiscal más efectiva en las que los corruptos sean sentenciados a la cárcel y su fianza se convierta en una devolución del dinero robado, probado en juicio, se recuperaría el dinero robado junto con un poco más de justicia sobre ellos. De esta forma ese dinero podría emplearse en recuperar la sanidad pública a la vez que invirtiendo en sistemas estratégicos por todos el país no se mejoraría la marca España pero si se expandiría ofreciendo nuevos mercados y más entrada de dinero junto con menos dependencia exterior en tecnología y ciencia, ganando a su vez puestos de trabajos para la fuga de cerebros y para que la mano de obra española encuentre un asentamiento fijo de su puesto de trabajo con cursos adaptados al ambiente laboral al que se presentan. Aumentando el contenido en los FP y en los cursos del iném. A su vez, en esta ampliación del curso se añadiría una asignatura o una serie de horas presenciales en las que se expliquen problemas sociales tales como la alimentación, el fraude fiscal y se de iniciación al pensamiento racional para no tener una población sometida a programas electorales utópicos. Además, para las siguientes generaciones, han de recibir formación alimenticia desde jóvenes, potenciando los alimentos ecológicos, basándose en la pirámide alimenticia y potenciando, además, el deporte. La base de la mejora es la educación y la justicia, facilidad para obtener información a todos la sociedad, leyes leales a los ciudadanos y fomentando en un mercado laboral estable convirtiéndonos en país de ciencia envés de eurovegas proporcionará un cambio social que nos convierta en ciudadanos de primera, con buen uso de la razón, con disponibilidad al conocimiento y capaces de confiar en las cabezas políticas. Es la educación la base del cambio, ya lo dijo Nelson Mandela “la educación es ese instrumento que sirve para que el hijo de un campesino pueda ser médico o para que el hijo de un obrero industrial pueda llegar a ser presidente”, por tanto, invirtiendo en educación se invierte en riqueza, autoridad, justicia, salud y futuro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario